Paso Generacional ( todo pasa y todo cambia)

Yo tengo ya casi tres décadas de vivir en este hermoso mundo y desde que soy padre me empecé a dar cuenta como entre en un periodo de cambio, por un momento me vi siendo como mis padres y el joven libertino que le encantaba la fiesta, la diversión y la aventura daba paso a un hombre mas serio consciente de las responsabilidades y consciente de las prioridades en la vida.
Empecé a ver como los jóvenes adolescentes desafiaban al mundo creyendo que todo lo saben y recordé muchas etapas de mi vida cuando desafié el peligro una y otra vez creyendome invencible, era parte de la vida pasar por este periodo en el que jugaba a ser un Dios.
La vida va pasando rápido y a medida que pasa me doy cuenta como todo cambia, veo a mis abuelos y analizo su forma de ser, sus pensamientos y creencias poco tiene que ver con la de mis padres y tíos y la de mis hermanas y la mía poco se asemejan a la de mis padres, todo cambia, cada generación aprende mas y avanza mas rápido. Las generaciones viejas pregonan con orgullo como ellos consiguieron las cosas cuando era mas difícil y los jóvenes pregonan con orgullo como hacen mas cosas y de una manera mas veloz que sus antecesores.
Sin embargo en silencio los viejos sienten miedo de como la juventud los supera y los jóvenes sienten que les falta la fuerza y sabiduría que poseen los viejos que sin tanta tecnología lograban sacar las tareas.
En esa relación viejo-joven se crea una competencia que genera también cierto respeto, los antecesores solo piensan en proteger a los que vienen y procuran dar todas las lecciones que puedan antes de que lleguen a perder su posición de maestros.
Hace unas tres semanas fui a una de mis incursiones a la montana, tenia que hacer algo muy especial y fui a un lugar mágico, pero no iría solo, mis amigos me acompañaron, todos somos de edades parecidas, pero también iría el padre de mi mejor amigo, este señor es como un padre para mi, me enseno mucho de lo que hoy se y día a día me a demostrado que aun con seis décadas de existencia se puede tener un espíritu fuerte y joven. Domingo a domingo el juega fútbol con nosotros y su entrega es total, corre mas que muchos y se enfrenta a cualquiera sin importar el físico o la edad, es un hombre admirable que ese día me mostró un lado muy hermoso de la vida.
Empezamos la aventura yo me quería adelantar, siempre me gusta ir de primero, siento que marco el camino a seguir y a la vez protejo a mis amigos, porque al primero es el que generalmente sufre el daño, pero no dejaba de pensar en Mario, pensé que era algo muy difícil para el por su edad, pero pensaba Esteban y Eric sus hijos lo protegen y yo confió en ellos, a medida de que avanzabamos por el bosque hasta el rió me di cuenta que tanto ellos como el estaban pendientes de la seguridad y bienestar tanto de ellos como de todos y me hizo pensar en la relación entre las generaciones, los que salen cuidan y ensenan y los que vienen empiezan a cuidar a los que les ensenaron como hacerlo, una hermosa relación de alumno y maestro. Este lazo tan hermoso  es algo que ahora experimento y aprecio, antes no lo veía, recuerdo cuando me varaba o no podía solucionar un problema en mi trabajo llamaba a mi padre y el parecía siempre saber que hacer, me salvo tantas veces y siempre me sentía inútil, que no podía cuidar a nadie, pero no veía que era parte del proceso de la vida, paso el tiempo y luego me di cuenta que no necesitaba mas que me rescataran y empecé a ser yo el que rescataba a otros, luego de este periodo de apreciación entendí mas de como el paso generacional se va dando, es un proceso tan bello.
Ese día caminamos por el rió y vi a Mario probándose a si mismo, vi en sus ojos recuerdos de su juventud, mas de una vez se vio el y sus amigos de aquel entonces haciendo lo mismo, lo vi pensar en como la fuerza que ahora sentía era diferente, en como estaba feliz que sus hijos hicieran cosas tan sanas como las que el hizo, lo vi feliz y lo vi aveces preocupado, porque en ocasiones se recordaba que va de salida y creo que debe ser duro pensar en eso.
Al final de la aventura todos regresamos sanos y a salvo, llegamos a la catarata y disfrutamos, mientras lavaba mi alma dentro de la cascada pensé en tantas cosas, en mi hijo y en como me gustaría llevarlo a ese lugar mágico, en compartir mi conocimiento y alimentarme de el suyo.
La vida es un paso y mientras lo damos pasaremos muchas etapas, todo cambia, las cosas parecen simplificarse mas y mas y los procesos se aceleran tanto que cada vez se quiere hacer mas y mas, tal vez el pasado era parecido pero de forma diferente, evolucionamos cada día sin darnos cuenta y nadie esta excento de ese cambio generacional, si bien un día mi padre y madre cuidaron de mi yo hoy en parte cuido de ellos, hoy yo cuido a mi hijo y estoy seguro el algún día me cuidara, solo se me ocurre seguir aprendiendo y cuidandome al máximo para poder seguir presenciando este bello proceso, espero algún día ver a mis nietos o a los hijos de mis hermanas o de mis amigos, cada vida es un milagro y cada generación es la oportunidad perfecta para hacer bien las cosas.
De mi parte tratare dejar huella e invaluables lecciones